limpiar, cocinar, recoger y fregar...
Más
que lo que hacía, importa pensar cómo lo hacía:
con
cariño, con cuidado para que todo quedara bien
El
amor que tenía a los de su familia se lo
manifestaba
sirviéndoles.
El
ejemplo de María nos vale hoy para
poner
nosotros cariño y cuidado en lo que hacemos;
porque...
se aprende de lo que se hace.
Imitando
a María, vamos a pensar por qué hacemos las cosas, a quién queremos agradar...
¿a nuestros padres? ¿a los que nos educan?
En el modo de hacer las cosas demostramos cuánto les queremos.
María,
en
la oración de hoy,
te
pedimos por nuestro modo de trabajar. Enséñanos
lo que tú practicabas:
a
poner cariño y cuidado en lo que hacemos.
Que
en los años de colegio aprendamos a ser responsables.
Que
pensemos siempre que trabajando
servimos
a la sociedad y
colaboramos
con Dios para cuidar el mundo.
Que
nos esforcemos por conseguir lo que está bien hecho. Porque el servicio y el amor es lo que
demuestra a los otros que nos importan. ¡Santa
María, madre de Dios y madre nuestra,
que
pongamos amor en nuestro trabajo!
No hay comentarios:
Publicar un comentario