lunes, 30 de marzo de 2015

Caminar con otros creyentes



Entrar en Cuaresma es inaugurar un tiempo fuerte para aprovecha la oportunidad.
Entrar en Cuaresma es una llamada a salir de nosotros, de nuestras casas, de nuestros prejuicios, de nuestros intereses, gustos y comodidades... sal de ti y ve hacia el otro.
Entrar en Cuaresma es afrontar la realidad personal descúbrete, acéptate, conviértete.
Entrar en Cuaresma es dejar poner nuestro corazón en la sintonía del corazón de Dios...práctica la compasión que hace hermanos.
Entrar en Cuaresma es vaciar nuestras manos, saber renunciar a nuestras seguridades, a aquello que nos esclaviza... libérate para poder abrazar.
Entrar en Cuaresma es saber caminar con otros creyentes que buscan a Dios siguiendo a Jesús en Espíritu y en Verdad...¡Buen camino!

domingo, 29 de marzo de 2015

Ponerme en camino


Señor, sí quiero.
Quiero abandonar la rutina y ponerme en camino hacia Ti. Tú, Señor, nos has dicho que te escuchemos;
porque tú eres el camino, el centro de nuestros destinos,
el Maestro. Tú eres el que delante de nosotros,
vas dejando tus huellas
para que te sigamos y te encontremos. Gracias, Señor, porque sabemos por dónde ir.

Gracias, Señor, porque no estamos solos.
Tú nos acompañas; es más, vas delante de nosotros.

Gracias, Señor,
porque nos das a conocer la meta: tu vida. La verdadera Vida.

Pasión de nuestro Señor Jesucristo según san Marcos (15,1-39)


C. Apenas se hizo de día, los sumos sacerdotes, con los ancianos, los escribas y el Sanedrín en pleno, se reunieron, y, atando a jesús, lo llevaron y lo entregaron a Pilato. Pilato le preguntó:
S. «¿Eres tú el rey de los judíos?»
C. Él respondió:
+ «Tú lo dices.»
C. Y los sumos sacerdotes lo acusaban de muchas cosas. Pilato le preguntó de nuevo:
S. «¿No contestas nada? Mira cuántos cargos presentan contra ti.»
C. Jesús no contestó más; de modo que Pilato estaba muy extrañado. Por la fiesta solía soltarse un preso, el que le pidieran. Estaba en la cárcel un tal Barrabás, con los revoltosos que habían cometido un homicidio en la revuelta. La gente subió y empezó a pedir el indulto de costumbre. Pilato les contestó:
S. «¿Queréis que os suelte al rey de los judíos?»
C. Pues sabía que los sumos sacerdotes se lo habían entregado por envidia. Pero los sumos sacerdotes soliviantaron a la gente para que pidieran la libertad de Barrabás. Pilato tomó de nuevo la palabra y les preguntó:
S. «¿Qué hago con el que llamáis rey de los judíos?»
C. Ellos gritaron de nuevo:
S. «¡Crucifícalo!»
C. Pilato les dijo:
S. «Pues ¿qué mal ha hecho?»
C. Ellos gritaron más fuerte:
S. «¡Crucifícalo!»
C. Y Pilato, queriendo dar gusto a la gente, les soltó a Barrabás; y a Jesús, después de azotarlo, lo entregó para que lo crucificaran. Los soldados se lo llevaron al interior del palacio –al pretorio– y reunieron a toda la compañía. Lo vistieron de púrpura, le pusieron una corona de espinas, que habían trenzado, y comenzaron a hacerle el saludo:
S. «¡Salve, rey de los judíos!»
C. Le golpearon la cabeza con una caña, le escupieron; y, doblando las rodillas, se postraban ante él. Terminada la burla, le quitaron la púrpura y le pusieron su ropa. Y lo sacaron para crucificarlo. Y a uno que pasaba, de vuelta del campo, a Simón de Cirene, el padre de Alejandro y de Rufo, lo forzaron a llevar la cruz. Y llevaron a Jesús al Gólgota (que quiere decir lugar de «la Calavera»), y le ofrecieron vino con mirra; pero él no lo aceptó. Lo crucificaron y se repartieron sus ropas, echándolas a suerte, para ver lo que se llevaba cada uno. Era media mañana cuando lo crucificaron. En el letrero de la acusación estaba escrito: «El rey de los judíos.» Crucificaron con él a dos bandidos, uno a su derecha y otro a su izquierda. Así se cumplió la Escritura que dice: «Lo consideraron como un malhechor.» Los que pasaban lo injuriaban, meneando la cabeza y diciendo:
S. «¡Anda!, tú que destruías el templo y lo reconstruías en tres días, sálvate a ti mismo bajando de la cruz.»
C. Los sumos sacerdotes con los escribas se burlaban también de él, diciendo:
S. «A otros ha salvado, y a sí mismo no se puede salvar. Que el Mesías, el rey de Israel, baje ahora de la cruz, para que lo veamos y creamos.»
C. También los que estaban crucificados con él lo insultaban. Al llegar el mediodía, toda la región quedó en tinieblas hasta la media tarde. Y, a la media tarde, jesús clamó con voz potente:
+ «Eloí, Eloí, lamá sabaktaní.»
C. Que significa:
+ «Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?»
C. Algunos de los presentes, al oírlo, decían:
S. «Mira, está llamando a Elías.»
C. Y uno echó a correr y, empapando una esponja en vinagre, la sujetó a una caña, y le daba de beber, diciendo:
S. «Dejad, a ver si viene Elías a bajarlo.»
C. Y Jesús, dando un fuerte grito, expiró. El velo del templo se rasgó en dos, de arriba abajo. El centurión, que estaba enfrente, al ver cómo había expirado, dijo:
S. «Realmente este hombre era Hijo de Dios.»

sábado, 28 de marzo de 2015

Hay otra manera de SER



Descubrir que hay otra manera de ser y de vivir, que hay cosas que podemos y tenemos que cambiar no lo descubrimos si no nos lo descubren..., si no nos habla la Palabra de Dios. Hay cosas que “no son de cajón”. Lo de Dios “no es de cajón”. Lo de Dios es de susurro, de sensibilidad, de no vivir en superficialidad. Lo de Dios se percibe mejor cuando se vive con el corazón. Como sólo vivas con los ojos y con el bolsillo... no descubrirás a Dios. 
Hay gente que no descubre que necesita dar más cariño, más tiempo, más detalles, más palabra, más besos, menos gritos... Hay gente que no se da cuenta de que existen otros que necesitan algo más de nuestro corazón.
Nos parece que estamos bien, y nos disculpamos o justificamos diciendo: “Es que yo soy así” A lo mejor poco a poco te has hecho así, pero antes no eras así; en todo caso, puedes ser de otra manera. Estás llamado, invitado a ser de otra manera, más humana, más divina. Por delante tienes 40 días para escuchar: “Vuelve a mí de todo corazón”. “Vuelve a mí con todo el corazón”. “Vuelve también a tu corazón”. “Vuelve a habitarte”

viernes, 27 de marzo de 2015

Podemos ser mejor



Hay quién dice que los seres humanos no tenemos remedio, que estamos destinados a causarnos daño entre nosotros y al planeta. Otros dicen con la cabeza bien alta: “Yo es que soy así…” o “A mis años ya no voy a cambiar…”
Jesús nos dice que el hombre puede ser mejor, puede cambiar,… No todo es malo en esta humanidad. Muchas veces hemos conocido testimonios de gente que orienta su vida hacia el bien a los demás. La esperanza no se debe perder.   ¡Podemos cambiar y ser mejores! 
RECUERDA: En nuestra vida es importante también tener momentos de iluminación. Pero a veces vamos tan rápido que no dejamos que la luz entre en nuestros corazones. En Cuaresma se nos propone dedicar tiempo a la oración, al silencio como tiempo de iluminación, como tiempo estar en sintonía con Dios.

jueves, 26 de marzo de 2015

Cada minuto algo positivo



     Queremos invitaros a vivir haciendo de cada minuto algo positivo. Sabiendo hacer, queriendo escuchar, aprendiendo a estar con los demás, acompañando a los que lo están pasando mal, sonriendo, siendo cordiales y amables... Todos estos pequeños detalles tienen un efecto multiplicador, por no decir exponencial, que se percibe mucho más de lo que podríamos pensar. Estas son las buenas noticias que nos hacen falta a todos, y a saber cuántas soledades y malos momentos podríamos haber evitado con estos sencillos ingredientes. Así que, como nunca es tarde, atrevámonos e empezar a ser Buena Noticia para los que nos rodean. Construyamos con confianza un mundo mejor y para todos. 
     ¿Qué hecho importante o pequeño detalle te ha hecho pensar, alguna vez, que puedes dar un paso adelante en tu vida?      ¿Se puede ser Buena Noticia caminando en solitario?