En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «En aquellos días, después
de esa gran angustia, el sol se hará tinieblas, la luna no dará su resplandor,
las estrellas caerán del cielo, los astros se tambalearán. Entonces verán venir
al Hijo del hombre sobre las nubes con gran poder y majestad; enviará a los
ángeles para reunir a sus elegidos de los cuatro vientos, de horizonte a
horizonte. Aprended de esta parábola de la higuera: Cuando las ramas se ponen
tiernas y brotan las yemas, deducís que el verano está cerca; pues cuando veáis
vosotros suceder esto, sabed que él está cerca, a la puerta. Os aseguro que no
pasará esta generación antes que todo se cumpla. El cielo y la tierra pasarán,
mis palabras no pasarán, aunque el día y la hora nadie lo sabe, ni los ángeles
del cielo ni el Hijo, sólo el Padre.»
Palabra del Señor
No hay comentarios:
Publicar un comentario